Hoy ha vuelto a ser un día muy caótico. Parece que
cada clase tenemos que hacer más y más. No solo eso, por muchos intentos que
hagamos parece que no hay manera de entendernos.
Al final lo que hemos hecho en clase ha sido crear
un Drive entre las del grupo modular y más tarde nos hemos separado en trabajo
de esta manera:
Aintzane e Izaskun: preparar un esquema común para todas
de la última charla.
Amaia, Ane e Iraia (yo): seguir con sus blogs y
escribir lo que hemos hecho hoy.
La
verdad es que en esta publicación quisiera centrarme en mis compañeras y en
nuestro trabajo en conjunto. La verdad es que pocas veces se encuentra un grupo
en el que todas las participantes trabajan y aportan por igual.
Muchas
veces en la universidad necesitas a tus compañeros y compañeras para poder
hacer muchas cosas y en mi caso, este grupo es mi gran apoyo. Gracias a ellas
muchas veces consigo la paz y la concentración que necesito y desgraciadamente
la universidad es algo que me trae por la calle de la amargura muchas veces.
Creo
que lo más importante en la vida es el tiempo, porque es algo que te pueden
quitar con facilidad y que nadie nunca te va a devolver. Lo que me pasa a mi es
que en esta carrera o grado (ya apenas se ni lo que estoy estudiando) me parece
que lo único que hace es quitarme tiempo y no aportarme nada de provecho.
La
educación es una construcción social, eso es algo que nadie puede negar,
entonces ¿por qué pasamos tanto tiempo dando lingüistas y tan poco estudiando
la sociedad?
Creo
que la universidad nos debería dar herramientas para trabajar lo mejor posible
cuando entremos en el mundo laboral y la verdad si un niño o niña me llora, puede
que Piaget, Barunna, Chomsky… puedan guiarme, pero seguro que no es la ayuda
que necesitare en dicho momento.
Llega
un momento en que lo absurdo me supera y gracias a mis compañeras, me calmo y
me pongo a hacer todas las cosas que tanto tiempo me quitan y tan poco me
aportan, pareciera que universidad es un factor toxico en mi vida, y la verdad
que me da mucha pena.
Voy
a terminar agradeciendo a mis amigas su ayuda y comprensión. Yo también soy una
buena compañera, o eso espero, procuro hacer siempre lo mejor para el grupo y
no me importa hacer demás si alguna de ellas no puede por la razón que sea. Adoro
mi grupo, es lo mejor que me ha dado la universidad: amigas de verdad.
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