Maria Herrador

Hoy 31 de enero hemos tenido la primera charla. La verdad que ha sido muy interesante. Esta vez, hemos tenido la suerte de poder escuchar la charla de Maria Herrador, una profesora de la escuela de Zubieta. Esta escuela es una de las 25 eskola txikiak que hay en Guipúzcoa.

Mi compañera Aintzane ha puesto en su blog las características de las “eskola txikiak” y me ha parecido interesante incorporarlo:

1. Es una escuela pública y es la única del pueblo o del barrio.

2. Es una escuela vasca

3.  Está formada por seis clases o menos.

4.  Son grupos pequeños

5. Los niños de diferente edad están en la misma clase.

6. Se fomenta la cooperación y la interacción de forma natural.

7. Relación directa con la naturaleza.

8. Un lugar ameno para conocerse y tener en cuenta a todos.

9. Relación estrecha entre padres y profesores.

            Yo vengo de un pueblo donde hay una “eskola txikia”, Txirrita eskola, Ereñozuko eskola. Esta escuela esta a las afueras del pueblo, camino Goizueta y esta totalmente rodeado de naturaleza y tranquilidad. Los niños que viven en Ereñozu y alrededores, ya que hay muchos caseríos por esa zona, van a dicha escuela y de esta manera los padres y los niños se ahorran un montón de quilómetros en coche todos los días.

            Otra de las ventajas de las escuelas pequeñas, en mi opinión, es que al tener un grupo más reducido, tienes más posibilidades de llevar a cabo diferentes proyectos. El proyecto que nos ha explicado María Herrador es uno de estos: “Pelikula Proiektua”.

            “Pelikula proiektua” se basa en el trabajo por proyectos. El año pasado, en la asignatura de plástica investigamos sobre lo que era los trabajos por proyectos y al final de curso, cada grupo explico como enseñarían un concepto o varios a través de este tipo de metodología.

            Según lo que he aprendido hasta ahora, los trabajos por proyectos se basan en coger un tema que encienda el espíritu de aprender de los niños y enseñarles mediante diferentes tipos de proyectos (funciones de teatro, manualidades, excursiones…) todo lo que engloba el tema elegido. En este caso, en la escuela de Zubieta utilizaron la película “Mi vecino Totoro” para hacer una película propia con los niños.

            “Mi vecino Totoro” es una película de animación japonesa dirigida por Hayao Miyazaki. Dicha película fue elegida por la revista británica Time Out como la mejor largometraje de animación de la historia. En este film se cuenta la historia se retrata la vid rural japonesa de los años cincuenta. Las protagonistas son las hijas de un profesor universitario que se traslada con sus hijas y su mujer a una casa en el bosque. Las niñas descubren la existencia de seres mágicos en el bosque y conocen a Totoro, el rey del bosque.

            Este proyecto fue propuesto por Berritzegune y fue aceptado por las cinco profesoras del centro, aunque acordaron que cada una realizaría dicho proyecto utilizando las técnicas y métodos que considerarían oportunas.

            Maria nos enseño como llevaron el proyecto por etapas, nuestro profesor, Jose Miguel Correa, las explico en su propio blog:

1.    Comenzando con el visionado de la película dividida en periodos de veinte minutos dada la larga duración del film, 

2.  Sesiones de formación sobre algunos aspectos técnicos para la realización de la película

3.  Planificación de la grabación ( planificación del story board: fueron apuntando en un poster grande la secuencia de las diferentes escenas, personajes; proceso de toma de decisiones con votaciones de los alumnas para elegir títulos y otros detalles organizativos ), dibujo de escenarios y personajes con cartulina y pinturas con apoyo del cañón de proyección); 

4.  Desarrollo de la grabación ( grabación de tomas  con cámaras de vídeos, de fotografía, trípodes, software de edición como Pinnacle); y  

 proyección :la difusión de la película cuando se proyectó a los padres.”

            Este es un pequeño fragmento de la Pelicúla que nos niños y niñas de Zubieta han hecho con ayuda de sus profesoras:

            En la película que nos ha enseñado hemos podido ver como los niños trabajan de distinta manera a lo largo de todo el recorrido que ha conllevado este proyecto: viendo la película, dibujando escenarios y personajes, grabando las escenas con cámara de video y fotos…

            Los niños han sido los protagonistas de la educación en este caso. María nos comentó que los niños y niñas disfrutaron mucho viendo la película Mi vecino Totoro. También comentó que ellos mismos pedían una y otra vez volver a verla.

            Me parece muy importante y fundamental que los niños sean los propios propulsores de la enseñanza, es decir, ellos mismos son los que quieren aprender más y más. Cuando a una persona le interesa lo que esta aprendiendo, está motivado y eso es, eso es una parte fundamental para que una idea u o conocimiento se interiorice de verdad.

            Este tipo de proyectos se basan en el aprendizaje cooperativo de learning by doing. Ahora mismo he comentado que uno de los factores claves para aprender algo era la motivación, pero por mucha motivación que haya si el aprendizaje no se basa en la experiencia, no valdrá para nada.

            Cuando tu experimentas: pruebas, fracasa, aciertas… de esta manera es como de verdad conoces e interiorizas algo, porque así creas recuerdos y momentos que el niño o la niña podrá recordar, será algo propio, algo vivido, no algo contado.

            Me parece muy interesante el uso que se le ha dado a la tecnología en este caso. En muy pocos años hemos pasado de solo tener teléfonos fijos a llevar ordenadores súper inteligentes en el bolsillo. Todo esto ha influido en nuestra cultura, vivimos en la era de la tecnología, ¿pero hasta que punto hacemos una buena práctica de dicha herramienta?

            En las aulas, por lo que yo he conocido hasta ahora, los ordenadores eran meras pizarras digitales. Los profesores seguían dando las mismas clases que hace veinte años, con la diferencia de que ahora en vez de escribir en una pizarra, lo hacían en un power point.

            Me parece algo muy bonito y enriquecedor la manera en la que se ha llevado este proyecto: por un lado, los niños han sido los protagonistas y las profesoras han sido capaces de adaptar el material y las herramientas para que los niños pudieran hacer uso de ellas. Por otro lado, es una es una utilización útil y productiva de las tecnologías, creando así trabajos realmente tan bonitos como la película que hemos visto hoy.